Carta para quien la quiera.
‘Bailaba sola y movía el mundo’.
Hola,
pequeñita.
Venía a
decirte que eres enorme.
Que vencida
estás preciosa, pero no te dejes nunca.
Que morirte de
vez en cuando es aprender a andar descalza por el miedo
y que
cortarte por amor es como tener que drogarte para vivir: inevitable.
Respira; y
recuérdate libre.
Haz-te
tu-ya.
Venía a
decirte que si te levantas con el pie izquierdo, bailes con el derecho.
Escúchame;
Si agachas
la cabeza que sea para besarte las rodillas,
si miras
hacia atrás que sea para tener ganas de seguir adelante.
Si se te
caen las lágrimas que sea porque ya no las quieres.
He venido a
decirte que tienes un vacío maravilloso en el que caben mil abrazos,
que te
pongas el vestido de flores y te deshagas el nudo del estómago;
que seas
feliz dentro de tu cajita de música triste.
Que
enamorarse del monstruo es como dudar de tu vida cada domingo: inevitable.
Oye, mi
pequeñita, que eres un cielo.
Un cielo
despejado en pleno enero cuando llueve sobre calado.
Quería
decirte que cojas mucho aire,
que los
golpes de suerte son golpes, al fin y al cabo
y que tengas
cuidado, que la nostalgia pica.
Que si te
cuentan mentiras, sea para dormir
y que eres
fuerte;
fuerte como una niña frágil vacía de miedos.
A ver, mi
niña, que te abraces y te escuches,
y acuérdate
siempre: tú eres tus alas.
Que hay
sonrisa en tu ruido
y viceversa.
Que tienes
una mirada fugaz que pide un deseo cada vez que se estrella.
Querer huir
y no hacerlo es recordarte, cada día, que tienes que olvidarlo.
No ser el
alguien de nadie siendo solamente y toda tuya;
y hacerte el
amor y la tonta y pensar en ti y en ti y en ti y en ti…
Mi tulipán;
tienes un beso infinito en cada punto débil y la boca llena de libertad.
Mi gusanito
de seda; conviértete en mariposa.
Asume tu
silencio como una victoria y aprende que hurgar en la herida ayuda a curarla.
Mi
pequeñita, solo vengo a decirte que cometer un error puede ser un acierto;
que hay que
masturbar el dolor hasta que desaparezca
y que
todavía existen personas que te cogen de la mano sin asfixiártela.
Mi luz del
túnel.
Mi
pequeñita, mi sol, mi baile de primavera…
Escúchame:
alguna magia es verdad;
y tú eres completamente cierta.
Lo único que tienes que hacer es no
dejar nunca de creer que la vida es maravillosa aunque, de vez en cuando, te
pise los pies al bailar.
Imresionante
ResponderEliminarGracias!
EliminarQue enamorarse del monstruo es como dudar de tu vida cada domingo: inevitable.
ResponderEliminarJo <3
GUAPA. <3333
EliminarSe lo voy a enviar, escrito a mano, a una amiga que tengo en Barcelona, porque no le encuentra sentido a nada y cree que lo más fácil es quitarse de en medio.
ResponderEliminarHe llorado con tu carta pensando en ella.
Impresionante.
Mágico.
ResponderEliminarhttp://yonosoychicaporno.blogspot.com/
Más que hermoso, eres increíble<3
ResponderEliminarBellísimo!
ResponderEliminarDe otro mundo... *-*
ResponderEliminarDe otro mundo... *-*
ResponderEliminarNo tengo palabras.eres muy grande me siento en tanta belleza muy identificada.me has ayudado mucho leeré tus palabras cada vez que me ahogue y caiga.
ResponderEliminarNo tengo palabras.eres muy grande me siento en tanta belleza muy identificada.me has ayudado mucho leeré tus palabras cada vez que me ahogue y caiga.
ResponderEliminar...alguna magia es verdad...��
ResponderEliminarme calientas el corazón con cada escrito, maga.
ResponderEliminarHoy necesitaba mucho leer esto. ❤️
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