Me he visto.
Una vez
vi una niña por los tejados,
pidiendo siete vidas.
Una vez
me vi andando entre límites,
sin caerme.
Una vez
vi pájaros bebiéndose el mar,
a tragos largos.
Una vez
volé,
sin salir de la cama.
Una vez
salté por el precipicio,
y ni rastro de arañazos.
Una vez
toqué el cielo,
y solo estaba de puntillas.
Una vez
me dispararon al corazón,
y sangré por la boca.
Una vez
leí un libro,
por encima de tu hombro.
Una vez
vi a la soledad,
dando la mano a la tristeza.
Una vez
miré fijamente a los ojos a un gato inmortal,
y me cantó a la sombra de la luna.
Una vez
fui amante,
sin ser amada.
Una vez
mordí con la mirada un par de manos que no hacían más que tocar lo prohibido.
Una vez
escuché a Sabina decir que "amores que matan,nunca mueren";
y desde entonces me he suicidado cada noche.
Una vez
leí "no me hablen de paisajes si no han visto su cuerpo",
y se hizo el silencio;
y escuché todo lo que me querías.
Una vez
me salpicaron lágrimas suyas,
y hasta hoy no he podido quitarme el sabor a infelicidad.
Una vez
me dejé llevar,
y acabé donde empecé.
Una vez
tuviste un accidente en mi espalda,
y te quedaste,inmortal,entre mis vicios.
Una vez
me descosí cada punto y aparte,
para que siguieras.
Una vez
tu,
y desde entonces ya no quedo.
Una vez
fui error,
y no me cometieron.
Una vez
viniste,
y te quedaste.
Una vez
me desnudó el viento,
y te esperé sentada tiritando del tiempo.
Una vez
te escribí,
y me leíste.
Una vez
te creí mi camino,
y salté sin mirar.
vi una niña por los tejados,
pidiendo siete vidas.
Una vez
me vi andando entre límites,
sin caerme.
Una vez
vi pájaros bebiéndose el mar,
a tragos largos.
Una vez
volé,
sin salir de la cama.
Una vez
salté por el precipicio,
y ni rastro de arañazos.
Una vez
toqué el cielo,
y solo estaba de puntillas.
Una vez
me dispararon al corazón,
y sangré por la boca.
Una vez
leí un libro,
por encima de tu hombro.
Una vez
vi a la soledad,
dando la mano a la tristeza.
Una vez
miré fijamente a los ojos a un gato inmortal,
y me cantó a la sombra de la luna.
Una vez
fui amante,
sin ser amada.
Una vez
mordí con la mirada un par de manos que no hacían más que tocar lo prohibido.
Una vez
escuché a Sabina decir que "amores que matan,nunca mueren";
y desde entonces me he suicidado cada noche.
Una vez
leí "no me hablen de paisajes si no han visto su cuerpo",
y se hizo el silencio;
y escuché todo lo que me querías.
Una vez
me salpicaron lágrimas suyas,
y hasta hoy no he podido quitarme el sabor a infelicidad.
Una vez
me dejé llevar,
y acabé donde empecé.
Una vez
tuviste un accidente en mi espalda,
y te quedaste,inmortal,entre mis vicios.
Una vez
me descosí cada punto y aparte,
para que siguieras.
Una vez
tu,
y desde entonces ya no quedo.
Una vez
fui error,
y no me cometieron.
Una vez
viniste,
y te quedaste.
Una vez
me desnudó el viento,
y te esperé sentada tiritando del tiempo.
Una vez
te escribí,
y me leíste.
Una vez
te creí mi camino,
y salté sin mirar.
Una vez no fue lógico,
Una vez fue amor.
Y te lo haría mil veces más.
Es bonito leer que algo ilógico, como es el amor, se volvería a cometer. Por mucho errores que cometan y te metan a ti en la ecuación, lo mejor es salir, estés despejada o no.
ResponderEliminarAhí fuera hay más viento que hostias, te lo aseguro.