La dulce violencia de volver a empezar o petición formal para que no te salves.





Te dí la mano y acabaste cogiéndome el corazón.

Te pedí que me mirases y no fuiste capaz de girarte para ver que estaba ahí.

No voy a escribir las más de cien mentiras que devoré,
tampoco voy a recordarte que hace poco querías salir corriendo a buscarme para encontrarte.
No quiero hablar de todo lo que nos hemos perdido;
de las intenciones, ni de las noches del 'te prometo que solo tú',
siempre nos hemos sabido a derrota,
en vez de sabernos de memoria.

Tal vez si hubieses probado a jugar a quererme
habríamos ganado la partida;
te habrías dado cuenta de que no hay mejor manera de morir que abrazado a mis ganas de follarte cada noche.

Estoy jodida
pero no contenta,
ni radiante;
resumiendo: estoy jodida.

Conozco precipicios para aburrir, 
pero,a la mierda; yo me hubiese tirado por el tuyo:
toda una vida.

Tengo el corazón sin hacer, 
la cama,
el café,
y el amor.

Préstame un poco de tu indiferencia, tu impasibilidad, tu indolencia, tu desdén;
sonríe a las jodidas mañanas,
vamos a emborracharnos los viernes y a disimular;
vamos a hacer como si todo este follón de ir, volver, fines de semana, sexo sinsentido, estaciones que parecen terminales, monstruos que no se quieren morir.... 
como si todo este jaleo no hubiese pasado, 
porque tú nunca quisiste pararte en mi estación y yo era el tren de tu vida.

Enamorarse es la hostia
y yo soy la tuya;
la que te ha faltado.

No nos hacían falta alas para volar, 
solo las ganas de huir y las noches de arrebatos sinceros de echarnos de menos desnudos por dentro y las ganas de desvestirnos por fuera.

Brillas por tu ausencia, cabrón.
Y yo te escribo esto para ponerte los puntos sobre las íes, 
pero contigo no me sale ni el punto y seguido.

Cambiaría la poesía,
el viento,
las flores 
y cualquier otra droga 
por un roce de tu piel que se lleve todo este estropicio;
que me lleve a mí,                                                                                                      contigo.
Que me traiga sueños y se lleve el insomnio,
que me deje sin palabras y que la felicidad, por un jodido instante, se corra de alegría al verme.

Estaría de puta madre;
y yo, también.

No soy musa, ni mucho menos poeta, ni poesía;
pero puedo ser tu última bala, tu secreto mejor guardado y el único que quieras contar, tu éxtasis, puedo ser tu gata y comerte la lengua, puedo ser sed y saciarte al mismo tiempo, puedo ser el 'ella' de tu Madrid, tu amante, tu amada, tu último beso, tus ganas de follar, tu revista porno favorita, tu droga o tu felicidad.


Porque no nos vamos a engañar:
si estás leyendo esto,
es porque 
todavía quieres morirte entre mis flores.

No seas imbécil.
vamos a jugar a que no me has perdido,
vamos a tropezar con la misma pena,
vamos a romper a volar,
vamos a desnudar al amor para tener menos frío.

No seas imbécil:
 ven, que tu mirada es mi mundo,
ven, que mi poesía eres tú,
ven, que vamos a jugar a destrozar la razón para que nos quede solo el corazón.



Ven;
porque no nos vamos a engañar:
si estás leyendo esto,
es porque todavía quieres morirte entre mis flores;
y yo que te lo escribo,
estoy deseando que vivas entre mis piernas. 

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares